Nuestras naciones están entrando a un sueño en que nos hemos quedado callados ante las injusticias y la impiedad. En
alas del humanismo y la relatividad moral hemos olvidado lo que Dios llama bueno y lo que llama malo, hemos aprendido a llamar a lo bueno, malo; y a lo malo, bueno. Otros simplemente se quedan callados. Mientras tanto muchos niños mueren sin quien los defienda en las garras del aborto. Por otro lado aplaudimos al que se amarra a un árbol para que no lo derriben o al que protesta contra el maltrato de animales. Dios quiere visitar en esta generación nuestra nación, hagamos
espacio para Él, no seamos como Belén que mientras dormía su rey nació, Dios hecho hombre, y lo rechazaron.
Excelente blog que bueno que todavia esta dando fruto!!! Recuerdo siempre como empezo todo!!!! Gracias Dios!!!
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Si con tus clases de maestría que gran bendición han sido para todos nosotros y para mas de 9,000 visitantes solo el año pasado. Este es un proyecto tuyo que le diste vida y aun sigue creciendo gracias a Dios. Bendiciones!
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