Tenemos el poder de publicar y anunciar buenas noticias a un mundo sobrecargado de malas noticias y desesperanzado sin Dios. Publica los testimonios que conoces, usa tu iphone y otras tecnologías para hacer algo mas que entretenerte y almacenar recuerdos. Entrevista a alguien que este haciendo el bien, que se este superando y/o ayudando a otros en tu comunidad, escuela, trabajo, universidad, etc. y publícalo. Si nos enajenamos del bien nos sumergimos en la desesperanza como pueblo, si nos enajenamos del mal no nos ocupamos de resolverlo; tenemos que conocer lo malo que está pasando, pero también debemos reconocer el bien que está ocurriendo en todo nuestro alrededor, porque en eso veremos la mano de Dios.